¿QUIÉN MOTIVA AL ENTRENADOR?

El entrenador que no está motivado, es muy difícil que pueda transmitir motivación a sus deportistas. Lo más probable es que les transmita su desmotivación, perjudicando al rendimiento general del equipo. En el lado opuesto, también es importante que el entrenador controle sus excesos de motivación. Esto aparece cuando la motivación es poco realista, superando el nivel que debería tener en función de las demandas y posibilidades de los deportistas y su entorno.

A continuación, se le ofrece un instrumento que puede ayudar al entrenador a controlar su motivación.Primero, deberá determinar su grado de motivación, debe reflexionar sobre su interés por entrenar (beneficios) y lo que está dispuesto a hacer (costes).

• Después, para observar si existe una sincronía o una discrepancia relevante entre las pretensiones propias y las de los demás, debe valorar lo que considera que esperan de usted los dirigentes que le han contratado y que es lo que los deportistas estaría dispuestos a hacer.
• Finalmente, debe decidir qué es lo más apropiado, teniendo en cuenta el conjunto de los apartados anteriores.

(Buceta, 2004)

Para conseguir controlar su propia motivación, en entrenador podría plantearse preguntas como las siguientes:

• ¿Por qué entreno?
• ¿Qué objetivos tengo como entrenador?
• ¿Cuál es mi sueño? ¿A que me gustaría llegar como entrenador?¿Hasta qué punto es un sueño posible?¿Que tendría que hacer para intentar lograrlo?
• ¿Cuáles son mis objetivos a medio plazo (2-3 años) ¿Son objetivos realistas? ¿Qué tendría que hacer para intentar conseguirlos?
• ¿Cuáles son mis objetivos a corto plazo (esta temporada)? ¿Son realistas? ¿Son compatibles con lo que se espera de mí y con los objetivos de los deportes que entreno? ¿Qué tendría que hacer para intentar lograrlos?

(Buceta, 2004)

Para empezar con buen pie hay que generar puntos positivos relacionados con la confianza, superación, implicación en nuestro trabajo y las ganas de mejorar y hacer mejorar a los demás.

 

Cuando lo veas todo negro…

Agárrate a aquellas cosas positivas que tengan tus jugadores y el equipo y empieza a trabajar a partir de ahí, partiendo de sus potencialidades para disimular sus defectos.

La automotivación es un recurso emocional que caracteriza a los grandes competidores. Al igual que a los deportistas, también a  los entrenadores que son capaces de formularse nuevos retos para ser mejores.

Raquel Romero Miñana. Psicóloga del Deporte

 entrenamientogandia@gmail.com